En medio de una creciente emergencia climática, Venezuela se enfrenta a una crisis severa debido al aumento de las temperaturas globales, que ha afectado significativamente el nivel del agua de los embalses que generan energía eléctrica en la región andina.
Esta problemática impacta especialmente a los estados Mérida, Táchira, Trujillo, Barinas y Alto Apure, donde los embalses de La Vueltosa y San Agatón del Complejo Hidroeléctrico Fabricio Ojeda, situada en el municipio Uribante del Estado Táchira, presentan niveles críticos de agua, así lo informó Marielys Sacipa, responsable de la Secretaría de Servicios Públicos de la Gobernación de Mérida y directora de Corpoelec en la entidad.
El Ejecutivo Nacional ha emitido un comunicado para informar que la situación no solo afecta a la región Los Andes, sino que también tiene repercusiones en otros estados del país. Ante la crisis de los niveles de embalse, se implementó un plan de administración de carga con el objetivo de reducir el consumo energético en cada uno de los estados.
Este plan es esencial para intentar mantener los niveles de agua en los embalses, especialmente críticos en Táchira, donde se ubica la central hidroeléctrica, dijo Sacipa.
Se anticipa que se vivirán al menos seis semanas de situación crítica, lo que ha llevado al Ejecutivo a establecer orientaciones sobre horarios laborales en instituciones públicas para reducir la demanda de electricidad. Estas medidas son necesarias para mitigar el impacto de la sequía y las altas temperaturas que han comenzado a azotar el territorio venezolano.
El embalse de la represa Santo Domingo, que sirve a la hidroeléctrica José Antonio Páez, ubicada en el municipio Cardenal Quintero de Mérida, también se enfrenta a niveles de agua alarmantemente bajos. Esto refleja la severidad de la sequía y destaca a la región andina como una de las más afectadas por las condiciones climáticas extremas, afirmó Marielys Sacipa.
Con información de Iván Alfonso Rivera.
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