En la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de Los Andes se realizó este martes 18 de julio la Conferencia Perspectivas Económicas para Venezuela: Enfrentando los Desafíos de una Economía Estancada, a cargo del director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros.
Durante esta actividad se indicó que el año pasado se tuvieron mejores indicadores, con un crecimiento de 20% pero en el segundo semestre se comenzó a retroceder, en la económica, lo que se vio reflejado en la caída del consumo, situación que se repite en el 2023.
Esto ha traído como consecuencia caída de ingresos, inflación, una contracción del 4 % con caída del consumo de 8 %, con un sector privado que tiene que replantear estrategias a un escenario más conservador.
Explicó que no están resueltos los problemas estructurales que afectan a una economía frágil como la venezolana, aunque se ha tenido eliminación de trabas, con relajamiento de controles y una pequeña liberación de la economía.
Se tiene una debilidad institucional, con una dolarización que está presente, pero no es legal, por lo que se ha sobredimensionado las expectativas, las cuales no se han cumplido.
Explicó que viene un proceso de ajustes y cambios que en el marco de una economía débil, serán insuficientes y difíciles, dado la magnitud de la caída que se ha tenido.
Venezuela ha tenido una gigantesca caída del PIB per capita, la más fuerte del mundo, poniendo al país entre los más pobres del planeta, generando limitaciones al sector privado,
Asegura Oliveros que el mercado interno es muy pequeño, dado que la capacidad de compra de la población, se centra en alimentos y medicamentos, un consumo básico que es muy limitado por los bajos salarios que se tienen, muy por debajo de los estándares internacionales.
Sector petrolero en crisis
Manifiesta que el sector petrolero, principal fuente generadora de divisas para Venezuela, está herido de gravedad, con un desplome en la producción y en la capacidad de refinación,
Señala que este sector está limitado en su recuperación, con un difícil panorama de crecimiento debido a una serie de problemas estructurales, los cuales se agrava con las sanciones que han impuesto los Estados Unidos y la Unión Europea a Venezuela y en especial a Pdvsa.
Refiere que hay un sector privado que está tratando de crecer, pero dada las condiciones del país, se le hace muy difícil.
Esta dificultad es producto de los pocos recursos que tiene la banca, lo que ha generado una contracción en el crédito, limitando la capacidad de expansión del sector privado.
Advierte que con una oferta restringida, problemas en servicios públicos, vialidad, falta de combustible, aumento desmedido de los impuestos, el crecimiento está restringido, restando competitividad a las empresas.
Indica el director de Ecoanalítica que se tiene una economía poco compleja y competitiva, pocos sectores exportan, además se tienen estructuras descoordinadas con capacidad limitada para generar ingresos.
Teniendo una desventaja enorme con el sector petrolero, el cual para el año pasado generó ingresos de 26 mil millones de dólares mientras el sector privado, logró un ingreso de 2 mil millones de dólares.
Empresa privada en aprietos
En todo este escenario, señala que, el Estado ha cambiado su manera de trabajar, ahora genera grupos para que gestionen, no quiere gastar, pero tampoco aplica los cambios, ni hace reestructuración, afectando en gran manera a los trabajadores.
A todo esto, acota que, se tiene un enfrentamiento entre radicales y moderados dentro del mismo gobierno, generando una distorsión en la economía nacional, generando una inestabilidad de precios que no ha terminado.
Afirma que, con esto se tiene un Estado colapsado como proveedor de políticas públicas, teniendo una tasa de cambio que no es sostenible.
Manifiesta que todo esto genera un desafío para las empresas, obligan a ser flexibles en la gerencia para responder de la mejor manera, además de fomentar la innovación, junto al empleo de herramientas gerenciales novedosas.
Considera necesaria la conexión entre el sector privado, la comunidad y las universidades, para generar cambios en la economía venezolana y generar soluciones.
Leonardo Rodríguez Dugarte / Compás Informativo
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