Luego de soportar más de 65 días de agonía, este jueves en la tarde murió uno de los vigilantes nocturnos del Parque Zoológico Chorros de Milla de la ciudad de Mérida, después de sufrir un grave accidente cuando intentó acariciar a uno de los leones de ese recinto.
El ciudadano, quien estaba bajo los efectos de las bebidas alcohólicas y violando las normas de seguridad del zoológico metió la mano en la jaula de los leones Carú y Murachí.
El hombre respondía al nombre de José Leopoldo Zambrano Dávila, de 59 años de edad, a quien pereció en el Instituto Autónomo Hospital Universitario de los Andes (Iahula), al presentar amputación traumática del brazo izquierdo y otras lesiones de gravedad.
De acuerdo a una versión oficial, se precisó que José Zambrano antes de ingresar a su puesto de trabajo estuvo ingiriendo bebidas alcohólicas con unos amigos en las cercanías del zoológico, y al llegar al recinto uno de sus compañeros, quien se percató que estaba ebrio, le recomendó que se fuera a descansar para evitar problemas laborales, sin embargo, Zambrano Dávila hizo caso omiso y se fue a hacer sus rondas.
Se presume que en horas de la madrugada del 28 de enero el vigilante intentó acariciar a uno de los leones luego de saltar una de las vayas de seguridad, siendo atacado por los felinos y quedando gravemente herido en el sitio hasta que su compañero lo localizó y notificó a los organismos de seguridad.
Con información de Jordin Morales
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