Manolo Muñoz: "El Caballo de Mil Batallas" llega a San Felipe

Manolo Muñoz regresó a Venezuela con un apoteósico triunfo en Mérida que ratificó su trayectoria en ruedos peruanos, amplia y triunfal con más de un centenar largo de corridas toreadas que le daban carta de presentación. 

Muñoz posee el oficio necesario para emprender nuevos caminos. Pero no hay que olvidar sus comienzos. En su etapa de novillero demostró valor contrastado, pues si se repasa un poco su carrera se puede apreciar por ejemplo en 2005 tras cortar oreja en La Victoria, en su tercer festejo en Valencia sufrió una fuerte cornada entrando a matar a un novillo de Tierra Blanca. 

Lejos de amilanarse, Muñoz siguió toreando lo poco que se puede torear en nuestras plazas como novillero pero dejando en el recuerdo por ejemplo la oreja que paseó en Maracay de un novillo de Laguna Blanca el 7 de octubre de 2007 que le valió para torear dos novilladas más en la Maestranza y una en Valencia donde dio una vuelta al ruedo. 

En 2010 volvió a conocer la cara del dolor en San Cristóbal al sufrir fractura de clavícula y varetazo ambos del lado izquierdo, pero así terminó la lidia de "Jarrero" y dio la vuelta al ruedo. Ese mismo año en su Valencia cortó las dos orejas al novillo "Rociero" de El Rocío dejando estela de torero importante. 

La ansiada alternativa llegó en Valencia el 20 de noviembre de 2011 con los toros de San José de Bolívar, con Leonardo Benítez de padrino, César Vargas Girón de testigo junto al rejoneador José Luis Rodríguez. Una vuelta al ruedo en su toro de alternativa abría el paso al escalafón mayor. 

En Venezuela ha toreado poco Manolo, en Valencia dio otra vuelta al ruedo en 2013 con un toro de El Capiro, sumando una tercera corrida en la Monumental valenciana y otra en La Grita ésta en 2016. Nueve largos años en los que nunca decayó su fe por volver a su tierra. En el presente año abrió campaña en Lajas el 6 de enero con toros de El Laurel dando la vuelta al ruedo en su primero y cortando las dos orejas a su segundo. 

Otras tres orejas paseó en el festival de Paiján con astados de Puerto San Luis y Bustamante. Y de allí a Mérida donde cual huracán llegó, vio y triunfó. Tras la oreja cortada a ley con su primero, indultó al gran "Encantador" número 13 de El Prado saliendo a hombros, ganando varios trofeos y sobre todo, dando un contundente golpe en la mesa. 

Ahora empieza a recoger los frutos de ese triunfo pues su nombre se ve en los dos carteles de la feria de San Felipe donde seguramente "El Caballo de Mil Batallas" pisará fuerte para seguir demostrando su valor, entrega y firmeza. Apunten su nombre porque Manolo Muñoz llegó para quedarse.

Crónica de Víctor Eduardo Ramírez Molina “Vitico”