Como dicta la tradición cristiana, hoy inicia el tiempo denominado Novendiale, un periodo de nueve días de luto tras la muerte del pontífice en el que se celebran misas, rezos y ceremonias de duelo para pedir por el alma del difunto.
Cuando termine este periodo, podrá comenzar oficialmente el cónclave en la fecha que los cardenales decidan. Los purpurados sí seguirán reuniéndose estos días en las denominadas Congregaciones generales de cardenales para seguir conociéndose y deliberar cuándo y cómo se celebrará el Cónclave, a la vez que van discutiendo sobre el perfil deseado para el nuevo Papa.
La calma que precede a la tormenta del Cónclave
El corresponsal de EL PAÍS en Roma, Íñigo Domínguez, considera que el funeral ha sido la calma que precede a la tormenta del Cónclave, en el que se elegirá al sucesor de Francisco: “Esa batalla será la que domine las próximas semanas. Uno discusión muy fuerte, que desde fuera no vamos a percibir mucho”.
Con información de El País
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