El opositor Edmundo González Urrutia afirmó que mantiene la determinación de regresar a Venezuela y minimizó las amenazas de detención que el chavismo ha lanzado en su contra.
«Perro que ladra no muerde. A esas especulaciones no les hago caso ni pierdo mi tiempo», afirmó en una entrevista con el medio digital Voz.
También aseguró que nunca ha sentido miedo, aunque reconoció que sí ha tomado las precauciones debidas porque trabaja para la recuperación de la democracia en Venezuela.
González expresó que cuando tomó la decisión de salir del país le planteó a María Corina Machado que desempeñaría desde el exterior una tarea que complemente el trabajo que la dirigente hace internamente. Hasta ahora, enfatizó, ha funcionado.
«Ha sido toda una dinámica de reuniones, conferencias, viajes, giras. Es una cadena de trabajo y me siento muy cómodo porque es un medio en el que me había desenvuelto anteriormente. Estoy haciendo algo que me gusta hacer y en lo que creo», expresó.
La transición es «una deuda» con los venezolanos
El candidato presidencial aclaró que, estratégicamente, no divulgado cómo regresará a Venezuela para asumir la presidencia de la República. Pese a que ha asegurado que se juramentará el 10 de enero, en esta ocasión habló de la posibilidad de que una transición ocurra «días o semanas» después.
«Nuestra intención es estar en Venezuela para que se respete la soberanía popular y la voluntad de los millones de venezolanos que votaron por la fórmula de Edmundo González. Es una deuda que tenemos y que queremos hacer cumplir«, manifestó.
«En el caso de que no fuese el 10, serán unos días o unas semanas más tarde, pero eso no lo van a cambiar», añadió.
Con información de AFP
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