Aumento de precios no es especulación, sino defensa


Luis Enrique Piña, economista, analista y calificador de Riesgo Bancario, aseguró que el aumento de los precios no es especulación por parte de los comerciantes, sino una medida de defensa racional para mantener sus negocios operativos ante la brecha cambiaria, que actualmente alcanza un 20%.

En sus declaraciones ofrecidas este viernes en el programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias, Piña explicó que quienes tienen un negocio pequeño y venden al tipo de cambio oficial se ven afectados porque la reposición de su inventario se basa en el tipo de cambio no oficial.

“Racionalmente, los comerciantes deciden incrementar los precios para reducir las pérdidas, ya que compran sus inventarios a un costo más alto de lo que pueden venderlos”, afirmó Piña.

Factores que intervienen en la brecha cambiaria


El economista subrayó que hay dos factores a considerar en esta problemática: la cantidad de dólares inyectados y el destino o la calidad de la entrega de dólares, es decir, a qué sectores y bancos se dirigen las divisas.

Señaló que, a pesar de la relativa estabilidad del tipo de cambio oficial, que oscila entre 36 y 37 bolívares por dólar, la brecha con el tipo de cambio paralelo pasó de un 5% o 7% a cerca del 20%.

Además, mencionó que este año el Banco Central de Venezuela (BCV) ha inyectado unos 3.500 millones de dólares al mercado cambiario, con un récord de 1.000 millones de dólares en julio. Sin embargo, consideró que esta oferta ha sido insuficiente para reducir la diferencia entre el tipo de cambio oficial y el paralelo.

Recomendaciones


“Se debe sincerar un poco el tipo de cambio oficial, que está sobrevaluado. Debería haber un deslizamiento muy poco a poco hacia el alza, que permita también la satisfacción tanto desde el punto de vista del demandante como del oferente, y se vaya cerrando la brecha paulatinamente”, sugirió Piña.

Asimismo, recomendó a empresarios y ciudadanos prestar especial atención al manejo del flujo de caja, tanto a nivel empresarial como personal, para poder cumplir con las obligaciones a finales de año, pero siempre previendo que después del 31 de diciembre hay un primero de enero y nuevo año por delante.

Con información de El Impulso

Publicar un comentario

0 Comentarios