Ministro del Interior anuncia la detención de dos españoles involucrados en "actos terroristas" en Venezuela

El ministro para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, informó en una rueda de prensa celebrada el pasado sábado sobre la detención de dos ciudadanos españoles presuntamente vinculados a actos terroristas en el país. Durante su declaración, Cabello también reveló la incautación de un significativo arsenal compuesto por 400 fusiles y pistolas, los cuales, según sus afirmaciones, se destinarían a provocar violencia en el territorio venezolano.

El funcionario enfatizó que este armamento había sido enviado desde Estados Unidos y que su investigación señala la participación de sectores políticos locales en planes para llevar a cabo "acciones fascistas". Estas acciones, según Cabello, estarían relacionadas con grupos de "presos" en diversas cárceles de Venezuela. "El gobierno de Estados Unidos está vinculado porque en la investigación descubrimos que en esos servicios de encomiendas el FBI estuvo allí", declaró, cuestionando la falta de acción del FBI durante la operación de entrega de armas.

Además, Cabello acusó a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de EE. UU. y al Centro de Inteligencia de España de estar detrás de operaciones en contra de Venezuela. En esta misma línea, anunció la captura de individuos que había intentado lanzar una granada hacia la Embajada de Argentina, donde se encuentran refugiados seis miembros del partido Vente Venezuela, con el objetivo aparente de culpar al gobierno venezolano.

Los detenidos que se encuentran bajo la lupa de las autoridades tienen supuestas conexiones con figuras como Belén Salas, alias "La Niña", Diomers Rincón, y Jesús Chirinos Rodríguez, alias "El Diablo", entre otros. Cabello expuso que estos individuos se comunicaban a través de "grupos religiosos" en redes sociales, donde planeaban acciones violentas, incluyendo asesinatos. También se mencionó a Gilber Caro, un opositor actualmente detenido en Estados Unidos, como parte de este entramado.

Las declaraciones del ministro reflejan una creciente preocupación de los líderes del chavismo y el gobierno venezolano de lo que consideran múltiples amenazas en su contra, al tiempo que se plantean acusaciones de injerencia extranjera en los asuntos internos del país.

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