El Centro de Justicia y Paz (Cepaz) ha presentado su informe anual sobre los femicidios en 2023, revelando que hubo 253 femicidios consumados y 134 frustrados, lo que significa un femicidio cada 22 horas.
Las consecuencias del femicidio van más allá de la pérdida de vidas. Expone Cepaz que 96 niños, niñas y adolescentes quedaron huérfanos como resultado de estos crímenes. De ellos, 27 presenciaron directamente los hechos y, en tres casos desgarradores, fueron testigos del suicidio del padre tras el femicidio de la madre.
El informe de Cepaz también arroja luz sobre las características de las víctimas y agresores. El 30,2% de las víctimas tenían entre 19 y 36 años, y el 23% eran madres. Preocupantemente, este año se incrementaron los casos de violencia contra adultas mayores (4% de las víctimas mortales). El 53,7% de las víctimas conocía al agresor, y en el 30% de los casos el femicidio ocurrió en el contexto de una relación de convivencia.
En cuanto a los agresores, el 31,2% se encuentra entre los 19 y 22 años. El 88,9% son venezolanos y, dato alarmante, el 3,6% son funcionarios policiales activos.
Entre los métodos más utilizados para perpetrar estos crímenes está el arma de fuego corta (23,3%), arma blanca (20,2%) y manos y pies (19,4%); las dos primeras van en descenso por motivos desconocidos, mientras que la última tiene un aumento significativo en relación con años anteriores.
Foto: Cortesía
Por: Valeria Fernanda Castro. Periodista egresada de la Universidad Católica Cecilio Acosta. CNP: 26.049.
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