El comercio merideño viene desde hace ya algunos años deteriorándose lentamente ante la deficiencia en la prestación de los servicios públicos como es la energía eléctrica y el agua potable, por parte de los entes oficiales ha perjudicado aún más ese comercio que lentamente ha venido funcionado en un estado depresivo.
Esta es la posición del presidente de la Cámara de Comercio del Estado Mérida, José Miguel Monagas, quien indicó, “cuando hablamos esto, nos ubicamos, por ejemplo, en la intención que el comercio comienza con la disminución en las proporciones de ventas en comparación con años anteriores”
Informó que los comerciantes en reiteradas ocasiones han denunciado la pérdida de productos. Entre los más afectados están las carnicerías y charcuterías, quienes dependen de las plantas eléctricas para poder mantener los alimentos. No obstante, la escasez de combustible es otro factor que limita a los comerciantes.
“Las interrupciones del servicio eléctrico están haciendo un serio daño a los comercios. Se han registrado daños en los equipos y alimentos. Además, algunos comerciantes no han podido efectuar a tiempo el pago de los tributos nacionales por no tener luz ni internet. A pesar de ello, son multados”, comentó el presidente.
En este sentido, señaló que los comerciantes pagan altas cantidades de bolívares por el servicio, sin embargo, el mismo ha empeorado en los últimos meses.
Concluyó Monagas, que “sin energía eléctrica, las telecomunicaciones no ayudan, y eso redunda Incluso en multas a los comercios porque no pueden pagar los días que les corresponde todo lo concerniente a la materia tributaria, hay países que se han desarrollado sin petróleo, pero ningún país o estado se ha podido desarrollar sin electricidad”, acotó.
Con información de Nelson Dugarte
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