El juicio a Donald Trump por mal manejo de documentos secretos secreto comenzará en mayo del próximo año, dijo el viernes la jueza que preside el caso.
La jueza del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, Aileen Cannon, ordenó que el juicio con jurado del expresidente, un hecho sin precedentes para un exmandatario, será en Fort Pierce, Florida, el 20 de mayo de 2024.
Los fiscales habían pedido que el juicio comenzara en diciembre, mientras que los abogados defensores de Trump habían solicitado realizarlo tras las elecciones presidenciales de noviembre de 2024.
“El Tribunal determina que los intereses de la justicia atendidos por esta continuación superan el mejor interés del público y de los acusados en un juicio rápido”, escribió Cannon.
El juicio no comenzará hasta bien avanzado el calendario de nominaciones presidenciales y probablemente mucho después de que el candidato republicano esté claro, aunque antes de que esa persona sea nominada oficialmente en la Convención Nacional Republicana.
Trump, de 77 años, es el favorito para la nominación presidencial republicana y el juicio se llevará a cabo en el punto álgido de la campaña primaria para seleccionar al abanderado del partido para las elecciones.
El expresidente se ha declarado inocente de más de una treintena de cargos que le han sido imputados en el marco del caso sobre los documentos clasificados hallados en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, tras su salida de la Casa Blanca.
Según la acusación, los documentos clasificados que Trump almacenaba en cajas en su vivienda contenían información "sensible" sobre las capacidades de Estados Unidos en materia armamentística.
Polémica
Cuando fue nombrada jueza hace tres años por Trump, Cannon difícilmente podía imaginarse que presidiría su juicio.
Su designación para el juicio ha añadido polémica al caso.
Trump es acusado de 37 cargos por haberse quedado deliberadamente con documentos estadounidenses altamente confidenciales en su casa de Mar-a-Lago, Florida. El expresidente dijo que tenía derecho a tener los documentos y que estaba negociando con las autoridades en el momento que el FBI allanó su residencia.
Algunos de los cargos conllevan hasta 20 años de cárcel, y Cannon decidirá la sentencia si un jurado lo declara culpable.
La presión es enorme, porque el juicio comenzará mientras se libra una batalla para las presidenciales de noviembre de 2024, con Trump liderando la carrera por la nominación republicana.
Nombramiento vitalicio
En 2020, con 38 años, Cannon era relativamente joven cuando Trump la nominó para un cargo vitalicio.
La jueza nació en Cali, Colombia, y se crió en Florida porque su madre emigró a Estados Unidos desde Cuba cuando era niña.
Cannon se licenció en derecho por la prestigiosa Universidad de Michigan.
Es miembro de la Federalist Society, que agrupa a abogados, jueces y expertos en derecho conservadores. Trabajó durante tres años en un bufete privado de Washington y durante siete años como ayudante del fiscal antes de convertirse en jueza.
Daniel Richman, profesor de derecho en la Universidad de Columbia, estima que un juez tiene un poder enorme sobre un juicio y desempeña un papel fundamental en cómo se desarrolla.
"Incluso en un caso corriente, el juez puede tener un efecto significativo y a veces incluso decisivo en el procedimiento", explicó Richman.
Otros estiman que Cannon se asegurará de que tenga un trato justo.
"Ahora es imposible que Trump se queje de que tiene un juez parcial en su contra", afirma Edward Foley, profesor de derecho constitucional de la Universidad Estatal de Ohio.
Thomas Holbrook, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Wisconsin-Milwaukee, estima que Cannon se halla en una "posición difícil". "Casi no importa lo que haga, alimentará la preocupación existente sobre su potencial parcialidad o decepcionará a los partidarios de Trump".
Con información de Diario de Las Américas
0 Comentarios