Este viernes se han presentado en la Asamblea Nacional de Francia dos mociones de censura contra el Gobierno del presidente francés, Emmanuel Macron como respuesta a la aprobación, el jueves, de la reforma de las pensiones por decreto, sin el voto de los diputados.
La reforma implica que, a partir de ahora, la edad de jubilación en Francia pase de los 62 a los 64 años. Algo que no ha gustado ni a la oposición ni a la ciudadanía, que ha salido a la calle a protestar de forma masiva. Las manifestación han derivado en la mayoría de ocasiones en graves disturbios, sobre todo en París.
A primera hora de este viernes, el número de detenidos durante las protestas superaba los 200. La ola de protestas se saldó, además, con numerosos daños de material urbano y varios heridos, alguno de ellos grave.
Las mociones han sido presentadas por la extrema derecha y por un grupo independentista y han sido firmadas por 91 diputados de varios partidos, ha anunciado el presidente del grupo parlamentario centrista y regionalista LIOT, Bertrand Pancher, informa la agencia Efe.
Falta de apoyos
En cualquier caso, ninguna de las mociones de censura ha recibido -por el momento- el respaldo escrito de ningún diputado del partido conservador LR, cuyos apoyos serán necesarios en el momento en que se vote para que tenga éxito, añade Efe.
¿Por qué protestan?
Miles de personas se han movilizado de forma espontánea en la simbólica plaza de la Concordia de París con el objetivo de hacer caer al actual Ejecutivo francés bajo el eslogan de "bloquear el país", tras aprobarse por decreto y sin voto esta impopular reforma de las pensiones.
Los manifestantes franceses exigen una salida democrática a esta situación que genera la impresión de que el poder está siendo "débil" en este caso, según aseguran los dirigentes izquierdistas de la Asamblea Nacional.
Philippe Martínez, el secretario general de la Confederación General de Trabajadores (CGT) ha asegurado que "es democracia" pedir consulta al pueblo francés, pues "la mayoría es absoluta en la oposición a esta injusta reforma y en el apoyo a las movilizaciones y a las huelgas".
Para otros protestantes, la respuesta que están teniendo se basa en el "desprecio" de Macron ante esta situación que para ellos resulta injusta al no poder haber participado en la decisión de elevar de 62 a 64 años la edad oficial de jubilación.
En total se han producido 310 detenciones durante la madrugada de este jueves, según el balance realizado por el Ministerio del Interior de Francia. La mayoría de ellas han sido arrestadas en París, en donde solamente 258 personas han sido detenidas tras los incidentes.
Una nueva jornada de paros ha sido ya convocada por parte de los principales sindicatos para el próximo jueves. Será la octava vez que organizan estas movilizaciones desde el mes de enero, y la situación no parece llegar a su fin con la decisión del Gobierno de recurrir al artículo 49.3 de la Constitución.
Con información de Antena 3
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