Por: Pltlg. Alfredo Hernández *
Desde hace algunos años, las fronteras que dividen a Venezuela y Colombia habían quedado selladas, pero no solo las fronteras físicas, sino también las ideológicas, por lo que era inimaginable la idea de que existiesen acuerdos políticos o comerciales entre ambos países.
Recientemente, la política colombiana dio un giro inesperado, uno que aún hoy resulta difícil de comprender para muchos. El arribo al poder de un sector político de izquierda cambió todos los acuerdos políticos existentes, y con ello, también cambió las formas conocidas de llevar la política exterior en ese país.
En este sentido, uno de los cambios más importantes y de mayores implicaciones, fue el de las relaciones políticas entre Colombia y Venezuela, relaciones que desde hace siete años no existían y tampoco existía ningún tipo de comunicación entre los gobiernos, hecho que con el nuevo gobierno colombiano se convirtió en una de las prioridades fundamentales.
En vista de estos acontecimientos nos atrevemos dar algunas conclusiones que intentan explicar los cambios subyacentes en la política exterior de ambos países y con ellos las implicaciones políticas y sociales que generan:
A). El primer y principal cambio que generó este hecho fue la forma en cómo el gobierno colombiano ve y entiende la política venezolana. El gobierno de Petro impulsó de nuevo las relaciones institucionales con Venezuela y con ello dejó de reconocer al "gobierno interino".
B). La reapertura de la frontera y, el impulso del intercambio comercial entre Colombia y Venezuela generará también un cambio importante para los venezolanos. Ahora será mucho más fácil poder adquirir y distribuir mercancías colombianas en territorio nacional, con lo que se espera que desaparezcan todas las trabas impuestas por los organismos de seguridad del Estado en Venezuela y con ellas, ojalá, el amedrentamiento extorsivo.
C). Algunos sectores comerciales serán beneficiados y otros competirán muy por debajo de sus condiciones óptimas. Para nadie es un secreto que el aparato comercial en Venezuela se encuentra muy debilitado, las políticas erradas que el gobierno chavista impuso al sector a lo largo de veintidós años han generado una caída muy importante en la producción comercial en Venezuela, actividad que se verá vulnerable ante la mayor estabilidad y rentabilidad que posee el comercio colombiano.
En este sentido, consideramos que la reapertura comercial entre Colombia y Venezuela representa un triunfo para los ciudadanos hijos de la frontera, que por años vieron romper sus vínculos por diferencias políticas e ideológicas.
Superada esta etapa,
solo podemos decir que esperamos que las relaciones políticas y comerciales no
se vuelvan a ver afectadas de llegar a producirse nuevos cambios coyunturales.
*. Politólogo, consultor digital y concejal de Mérida
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